Frente a posturas que proclaman, desde un optimismo casi mágico, que al finalizar esta pandemia que aqueja a la humanidad toda, los seres humanos vamos a ser mejores y más solidarios e incluso capaces de influir en la construcción de un sistema económico, social y político superador a este capitalismo financiero, me tomo el derecho a ser un tanto escéptico.

En mayor o menor medida todos estamos padeciendo las consecuencias económicas que significa esta situación, pero mucho más los sectores vulnerables de la sociedad, como somos los trabajadores informales de la economía popular.

En Chascomús artesanos y emprendedores presentamos un protocolo sanitario que fue aprobado por las autoridades provinciales, por lo cual comenzamos a trabajar en el  Paseo de los Artesanos el sábado 4 de julio.

Tras el paso de Chascomús a Fase 4, donde ciertas actividades como las reuniones sociales en domicilios particulares y sobre todo al aire libre quedaron excluidas, conjuntamente con autoridades municipales del área de la Dirección de Producción decidimos que era más viable armar la Feria en la Plaza Sarmiento, frente a la vieja estación, para poder contar con mayor concurrencia de personas.

Con gran estupor vimos como algunos comerciantes de la zona alertaban a medios de comunicación local sobre su preocupación por la desleal competencia que iba a generar el tener frente a sus locales puestos de artesanos y emprendedores, aludiendo a que ellos sí cumplen con las tasas municipales correspondientes.

Los artesanos y emprendedores formamos parte de la Economía Social, Popular, Solidaria de Subsistencia y también pagamos impuestos, no solamente con la modalidad del Monotributo Social, sino también con el pago del 21% del IVA en los productos que consumimos, incluso en los comercios de estos conciudadanos preocupados por nuestra presencia en la zona céntrica de la ciudad.

El fin de la pandemia debería confluir en una sociedad más justa, solidaria y mucho menos egoísta, donde  todos podamos sentirnos parte integrante de ella, más allá del punto de partida desigual. ¿Habremos aprendido?