Pareja integrada por un chascomunense y una platense generaron recursos para estar en México, pagar el avión de repatriación al país y pasar en la cuarentena con la plataforma Upwork, la cual evidentemente puede ser una salida laborar en este momento de aislamiento.

Otro chascomunense, Rodrigo Heguiabehere, regresó a Argentina hace horas, cumpliendo en este momento la cuarentena en La Plata con su pareja y compañera de viaje, Moira Márquez. Un año recorriendo Latinoamérica tras recibirse en diciembre de 2018 y luego de renunciar a sus respectivos trabajos para emprender la travesía en mayo de 2019.

No llegaron a estar varados y la vuelta reciente tampoco fue noticia, aunque sí la manera de financiarla, como de generar el sustento económico para seguir playas aztecas y actualmente pasar la cuarentena en la Ciudad de las Diagonales.

Es que desde hace un tiempo, estos dos administradores de empresa cambiaron los laburos en bares y restaurantes de México por Upwork, que es una plataforma global de trabajo independiente donde las empresas y los freelancers se conectan y colaboran de forma remota.

Tras decidir estirar el viaje planificado de 3 meses en Panamá, recorriendo Centroamérica y llegando a México, Hiya y Moi se quedaron sin ahorros y tuvieron que empezar a generar recursos para continuar con su andar: voluntariados (trabajo por casa, pero sin comida), mozos y lavaplatos en bares/restaurantes (en temporada no tan buena) y, finalmente, Upwork.

“Empezamos a evaluar la posibilidad de buscar trabajo por internet. No habíamos llevado computadora al viaje, pero nos compramos una, en realidad mi papá la compró. Pensamos primero que íbamos a trabajar de cualquier cosa, de lo que se nos presentara. Lo primero que se nos ocurrió fue completar encuestas y eso no fue posible porque estábamos en un lugar que no tenía buena conexión de internet, ni siquiera para hacer encuestas. Trabajar por internet se pospuso hasta que llegamos a un lugar con buena conexión, cerca del Caribe, en Tulum precisamente, pero nos fuimos informando”, contó la platense en diálogo virtual con ANTI.

“Nos hicimos una cuenta en Upwork, que fue una página que encontré simplemente googleando, poniendo ‘trabajá desde casa, trabajá a distancia´. Lo primero que se me ocurrió buscar es trabajo de transcripción. Te mandan un audio o un video y lo que tenés que hacer es pasarlo por escrito. En principio no tuvimos mucha suerte y tampoco teníamos internet”, agregó la hincha de Gimnasia.

“Cuando hicimos cuenta en Upworks vimos que había más trabajo para hacer, como data entry, que básicamente es trabajar con base de datos: te pasan un archivo y lo tenés que pasar a una hoja de cálculo de Excell, o tenés que tomar cierta información de internet y armar una base de datos. Es muy variado el trabajo que ofrecen, desde traducción, programación, desarrolladores, diseñadores”, siguió Moira.

CÓMO USAR UPWORK

En la continuidad del relato, la viajera de la capital bonaerense detalló: “Nosotros nos enfocamos en buscar data entry y transcripción. El primer trabajo lo consiguió Rodri, con un hombre de Estados Unidos, que quería difundir un mensaje que él tenía por formulario de contactos de páginas de Estados Unidos. Hay que tener en cuenta que Upwork está en inglés y casi todas las personas que publican ofertas de trabajo, lo hacen en ese idioma. Hay que saber inglés o usar bien el traductor. Funciona así: los empleadores publican un trabajo, te propones tras registrarte y, si te asignan, se firma un contrato a través de la página. A medida que vas cumpliendo con partes del contrato, te van pagando. En una primera instancia el dinero queda en la plataforma, por lo que el pago es seguro. Después, cuando el empleador aprueba tu trabajo, le da la orden a Upwork la orden que libere el pago. Ese dinero te queda en la página y tenés que elegir tu medio de cobro. Puede ser por PayPal o Payonner, que son dos monederos electrónicos, desde los cuales luego podés transferir a tu cuenta bancaria. Obviamente, como se sabe, en Argentina, se pesifica, el cambio no es muy conveniente, pero antes que nada. Caso contrario podés mantenerlo en dólares en PayPal o Payonner. Con esto quiero decir que no es obligatorio tener una cuenta en dólares”.

Y Moi terminó: “Ahora, que estamos en casa, con buen internet y en cuarentena, buscamos constantemente ofertas. Actualmente estamos con un contrato para manejo de redes sociales y contenido de empleador de Estados Unidos y seguimos aplicando en ofertas laborales constantemente. Recomendamos Upwork, no así las otras plataformas, como Freelancer.com, donde te piden pagar de entrada para poder aplicar a los trabajos. Upwork te da un tiempo de aplicación gratis”.

Por su parte, Rodrigo recomendó: “Para Upwork es importante tener paciencia y estar mucho rato en la compu mirando las cosas que se van subiendo. Por ahí es difícil que te contraten si no tenés ninguna referencia y esas cosas, pero en algún momento llega. Nosotros estuvimos más o menos 20 días hasta que surgió el primero, que pagaba bastante mal. El laburo era una pavada, pero demandaba muchas horas: 6 horas por día durante una semana para cobrar 30 dólares más o menos. Pero había que arrancar de alguna manera y además estábamos encerrados por la cuarentena”.

ANÉCDOTAS DE VIAJE Y TRABAJO REMOTO

Yendo a las anécdotas, la fanática del Lobo recordó: “Mientras estábamos en Tulum apliqué, un poco en chiste y un poco porque era muy bien pago, en una oferta laboral de una empresa turca que desarrolla aplicaciones y que necesitaba actores y actrices que hablen español para la publicidad de la aplicación. Mandé un video de lo más feo, croto, de baja calidad y sonido, pero igual me aceptaron. Me mandaron los guiones y yo les enviaba los videos selfies de 20 segundos que decían ‘te presento la aplicación…´ y al final fue el mejor contrato que tuve hasta el momento, porque esta empresa pagaba bastante bien por cada video y terminé haciendo casi 30, al punto que tenemos para pagar la deuda que nos generó el vuelo de repatriación”.

Por último, Hiya añadió: “La app que usamos muchísimo es Couchsourfing, que es una aplicación donde la gente te puede invitar a su casa, por el solo hecho de recibir gente y compartir momentos. La usamos en todos los países y creo que es de lo más significativo en cuanto a experiencias”.