El militar y político fundador del movimiento popular más importante de la historia de la Argentina estuvo en Chascomús promediando la década del 40, antes de presidente, pero poco se sabe sobre aquella visita, más allá de alguna foto y comentarios de quienes vivieron por cuestiones familiares aquel acontecimiento histórico que poco relato tiene por la ciudad de la laguna y del padre de la democracia.
En su mesa de luz, entre las fotos de su hijos y marido, como las de su juventud, una imagen, también en blanco y negro pero ubicada en el centro, resalta por sobre el resto, aunque no tanto por los años que tiene, más bien por la figura de un militar que no es familiar, pero está ahí, al lado de su padre.
“Vino a un acto al Club de Pelota y luego estuvo en el Club Social, donde papá era el presidente, para disfrutar de un copetín”, comentó Adelfa Plorutti al pasar, casi como en aquel agasajo de tiempo atrás por parte de la tradicional institución de la calle Libres del Sur, donde finalizó su “discurso” con un “mi padre fue el único peronista que no pudieron echar de acá”.
El de la foto, al lado de Hugo Plorutti, es Juan Domingo Perón, en probablemente su única visita a Chascomús, cuna de quien también fuera presidente, pero por el Radicalismo, Raúl Ricardo Alfonsín, contemporáneo justamente de Adelfita, que, como su papá, simpatizó por el Justicialismo y tampoco la echaron del Social.
De aquella presencia del secretario de Trabajo y Previsión de la Nación, cargo generado en noviembre de 1943 a través de decreto redactado por el chascomunense Juan Atilio Bramuglia, Guito Cazaux, también en ocasión del agasajo de su hermana en el Social, hizo su aporte entre copas.
“Perón estuvo en casa, donde compartimos una comida y le tuve que servir el vino”, recordó refiriéndose a la vivienda de la esquina de Libres del Sur y Lastra, frente al Reloj de los Italianos, donde los Plorutti y Cazaux convivieron ante la unión de sus padres viudos, evidenciando la falta de simpatía por el ilustre visitante.
Siendo complicada la búsqueda de precisiones, Ernesto Amézaga sumó a la causa con los datos publicados en tiempo atrás en su revista TE ACORDÁS CHASCOMÚS. “La visita de Perón fue en 1945; todavía no era presidente. La foto que sacamos en su momento es en el balcón del Social. Lo trajeron los hermanos Bramuglia, que tenían relación con él”, informó Tito.
Ahora, sorpresivamente o no, más detalles fueron imposibles de encontrar, no así la falta de memoria, de documentación o poco interés sobre lo que fue la visita a Chascomús del militar y político fundador del movimiento popular más importante de la historia de la Argentina.
Incluso, algunas respuestas recurrentes, como “los Plorutti fueron tan peronistas, como conservadores y radicales, en definitiva oficialistas”, parecieran tener más argumentos que el axioma “la única verdad es la realidad”, obviamente más allá de sus orígenes en el filósofo griego Aristóteles y reivindicación en el pensador alemán Kant.
Es que Juan Domingo Perón sigue provocando reacciones extremas, en aquel entonces y todavía hoy, casi 80 años después, en donde se lo nombre, pero más aún en la cuna del padre de la democracia, donde algunos rememoran esa visita con orgullo y otros, no tanto, al punto que, para ellos, parecería que estaría bueno olvidarla…